no me alejo, pero me muevo

«El Camino del Guerrero ofrece al ser humano una vida nueva,
y esa vida tiene que ser completamente nueva.
No puede uno llevar a esa nueva vida sus viejas y malas costumbres.»

Juan Matus

el método del “Yo Soy”

Visto en la comunidad Osho Akeed
alienadosCuanto más real te vuelves dentro de ti, más irreal se vuelve el mundo circundante. La realidad se vuelve «yo», y el mundo se vuelve irreal. El mun do es real o el «yo» es real: ambos no pueden ser reales. Ahora estás sintiendo que sólo eres un sue­ño; entonces el mundo es real. Cambia el énfasis. Vuélvete real, y el mundo se volverá irreal.

Gurdjieff trabajó con este método continua mente. Su principal discípulo, P. D. Ouspensky, cuenta que cuando Gurdjieff estaba trabajando con él con este método, y llevaba tres meses practicando continuamente este recuerdo de «yo soy, yo soy, yo soy», después de tres meses, todo se detuvo. Sólo una nota permaneció dentro como una música eterna: «Yo soy, yo soy, yo soy.» Pero entonces esto no era un esfuerzo. Era una actividad espontánea que continuaba: «Yo soy.» Enton­ces Gurdjieff le dijo a Ouspensky que saliera de la casa. Durante tres meses, lo había mantenido en la casa y no se le permitía salir.

Entonces Gurdjieff dijo: «Ven conmigo.» Es taban viviendo en una ciudad rusa, Tiflis. Gurd jieff le dijo que saliera, y se fueron a la calle. Ous pensky escribe en su diario: «Por primera vez pude comprender lo que Jesús quería decir cuando dijo que el hombre está dormido. La ciudad entera me pareció como que estaba dormida. La gente se movía dormida; los tenderos estaban vendiendo dormidos; los clientes estaban comprando dormi dos. Toda la ciudad estaba dormida. Miré a Gurd jieff: sólo él estaba despierto. La ciudad entera esta ba dormida. Estaban enfadados, estaban peleando, estaban amando, comprando, vendiendo, haciendo de todo.»

… continuar lectura…

amarse a sí mismo

Del libro Así habló Zaratustra de Friedrich Nietzsche.

espiíritu de la pesadez

El avestruz corre más rápido que el más rápido caballo, pero también esconde pesadamente la cabeza en la pesada tierra: así hace también el hombre que aún no puede volar.

Pesadas son para él la tierra y la vida; ¡y así lo quiere el espíritu de la pesadez! Mas quien quiera hacerse ligero y transformarse en un pájaro tiene que amarse a sí mismo: – así enseño yo.

No, ciertamente, con el amor de los enfermos y calenturientos: ¡pues en ellos hasta el amor propio exhala mal olor! Hay que aprender a amarse a sí mismo – así enseño yo – con un amor saludable y sano: a soportar estar consigo mismo y a no andar vagabundeando de un sitio para otro.

Semejante vagabundeo se bautiza a sí mismo con el nombre de «amor al prójimo»: con esta expresión se han dicho hasta ahora las mayores mentiras y se han cometido las mayores hipocresías, y en especial lo han hecho quienes caían pesados a todo el mundo.

Y en verdad, no es un mandamiento para hoy y para mañana el de aprender a amarse a sí mismo. Antes bien, de todas las artes es ésta la más delicada, la más sagaz, la última y la más paciente:

A quien tiene algo, en efecto, todo lo que él tiene suele estarle bien oculto; y de todos los tesoros es el propio el último que se desentierra, – así lo procura el espíritu de la pesadez.
Ya casi en la cuna se nos dota de palabras y de valores pesados: «bueno» y «malvado» – así se llama esa dote. Y en razón de ella se nos perdona que vivamos.
Y dejamos que los niños pequeños vengan a nosotros para impedirles a tiempo que se amen a sí mismos: así lo procura el espíritu de la pesadez.

Y nosotros – ¡nosotros llevamos fielmente cargada la dote que nos dan, sobre duros hombros y por ásperas montañas! Y si sudamos, se nos dice: «¡Sí, la vida es una carga pesada!»
¡Pero sólo el hombre es para sí mismo una carga pesada! Y esto porque lleva cargadas sobre sus hombros demasiadas cosas ajenas. Semejante al camello, se arrodilla y se deja cargar bien.

el gran secreto meafísico de la felicidad

por Conny Méndez, vía Camino al Ser

Parecería que esta receta fuera difícil de poner en práctica, pero no es cierto. Basta con ensayarla una sola vez para que no se vuelva a olvidar. Ahora, antes de comenzar a poner en práctica los puntos enumerados, hay que hacer el siguiente Decreto:CON UNA SOLA VEZ QUE YO ENSAYE LO QUE AQUÍ DIGO, NO SE ME VOLVERÁ A OLVIDAR JAMAS

1: YO no hablo, ni permito que se me hable nada contrario a la perfecta salud, la felicidad y la prosperidad.

2: YO le hago sentir a todo ser viviente que lo  considero valioso.

3: YO le busco el lado bueno a todo lo que me  ocurre y a todo lo que veo ocurrir a otros.

4: YO pienso en todo lo mejor. Espero todo lo  mejor. Trabajo únicamente por lo mejor.

5: YO siento igual entusiasmo por lo bueno que  le ocurre a otro, que por lo que me ocurre a mí.

6: YO olvido mis errores del pasado y sigo adelante a mayores triunfos.

7: YO llevo una expresión agradable en todo momento, y sonrío a todo ser que contacto.

8: YO no tengo tiempo para criticar a los demás,  ya que paso tanto tiempo mejorándome.

9: YO me hago tan fuerte que nada puede perturbar la paz de mi mente.

10: YO SOY demasiado grande para preocuparme. Demasiado noble para enfurecerme. Demasiado fuerte para temer. Demasiado feliz para permitir la presencia de algo negativo.