Mucho desorden trae consigo
esa espiritualidad anhelante
que antes de ordenar los fundamentos
crea castillos en el aire
que al poco andar se desmoronan.
Es primordial ordenar la base
limpiar el templo
comprender cada elemento que se adopta
y saber con claridad que son de voluntad propia,
para no engañarse,
las decisiones que nos harán avanzar
sabiendo que se habrá de soltar algo, renunciar,
para tomar lo que nos ofrece libertad.
La vía es simple,
pero la mente en desorden
suele complicarlo todo.
Considerar
que nuestra mente precondicionada
es viciosa de adoptar
ante todo, las formas,
y de proyectar lo anhelado
en lo aparente
sin saber por propia experiencia
lo que hay de verdad y justicia
para la personal correspondencia.
No todos partimos desde el mismo muelle
aún cuando vamos a un mismo horizonte.
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«El Camino del Guerrero ofrece al ser humano una vida nueva, y esa vida tiene que ser completamente nueva. No puede uno llevar a esa nueva vida sus viejas y malas costumbres.»
— Don Juan Matus
Ojo ahí
con los cachivaches que parasitan al Ser.
Considerar, observar y acechar
que quien nada sabe de la libertad
llamara a cualquier libertinaje como tal
y se engañará.
Está bien…
canta todos los mantrams que gustes,
vístete de blanco, de rosa o de violeta.
Decórate con amuletos, préndete velas,
práctica tu “yoga”, tus artes de adivinanzas,
pero si deseas avanzar realmente
no desconozcas tu estado en sombra
el error original que nos ha criado en error
para perpetuar las interferencias en la mente,
cuando en verdad
nuestra esencia es impecable (sin pecado › sin error)
y podemos re vincularnos con nuestro estado original
si en sinceridad lo intentamos,
así lo realizamos.
.
Mientras las apariencias – maya – engañan
es la percepción pura la que nos vuelve Almas,
y esta inocencia hay que lograrla
con fiel perseverancia.
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∴ Paz, Amor y Realización a todos los Seres
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› Arte de Nishesh Jaiswal