Somos todo

No existe algo así como “un humano”, separado de su contexto.
Somos todo esto… y aún más.
Cuando se maltrata alguna de sus partes, se afecta al todo,
así mismo cuando se ama.

Es ahora el tiempo de reconciliarnos
con la oportunidad que nos da el tiempo
para experimentarnos en nuestras relaciones,
pues no hay otro modo ni condición para sostener así las realidades que nos correspondan.

En abrazo fræterno
la existencia sostiene nuestras presencias en su ronda infinita.
Y mientas se insista en separar
sólo postergamos la oportunidad de experimentar nuestra totalidad automutilada.

Somos Todo Esto… y de ahí aún más.
Dios, por señalarlo de algún modo…
… pero la señal no es ni una pizca de lo señalado…
Somos una gran experiencia… individual, social, cultural, planetaria, cósmica… multidimensional

Con profunda humildad…
… somos infinitamente más que lo señalado como “humano»
mas, aquello que somos pierde un poco cuando nos restamos,
y más pierde la parte cuando se descarta del Todo.

∴ Paz, Amor y Realización a todos los Seres

bellaMente

Consagra la percepción a contemplar la Belleza.
Permite que ella haga lo que le es propio contigo.

No prestes tanta atención a la arbitrariedad vacía
que de ella dicta lo humano
en su pretensión, en su vanidad, en su ilusión.
Descúbrela en lo Esencial
Revélala desnuda.

Exponte a las frecuencias de orden armónico que emanan en la naturaleza.
Tal irradiación procura su más alta vibración a las dimensiones del Ser.

Reconócete en la Belleza.
Se la Belleza.

Deja que inspire en ti aquella Consciencia
desde donde es posible su experiencia.

Facilita que a través de ti se expanda.
Asume su custodia en donde te es posible:
— pensamiento, palabra y acción —

Profundiza en su silente sabiduría
y celébrala al compartir tus amables gestos
elevando tu participación,
conJugando amorosamente con tus hermanos
el delicado y poderoso juego de habitar el Paraíso.

Adiestra tus Artes.
Que la Belleza, en todo su desplante y esplendor,
te amaestren en su Don.

∴ Paz, Amor y Realización a todos los Seres

siento, luego existo

Lo Siento
no sé lo que hago
hago lo que puedo
y en el poder hago escuela de Libertad.
Atento a la respuesta
mi habilidad me señala el paisaje
luego celebro tanto de tanto
y en la responsabilidad amaestro la oportunidad de Ser,
de amar, su habilidad.

Lo Siento
y lo siento tanto.
Desde lo profundo
corazona el Alma su gracia,
eleva el pulso y su canto,
se hace trino en las mañanas,
se hace suspiro y cabalgata
en lo que puedo, mis ensueños,
despertando sus colores,
haciendo eco de lo eterno.
De lo efímero canta el silencio.

Lo siento
no sé lo que hago
porque ante todo, lo Siento.

Luego si se
algo de tanto.
Y de tanto, me salgo,
que ahogada la razón en el ‘saber’
alguna vez ni me supe
y resentido el paso
se amarga el canto.

Lo siento y lo comparto
pues ante todo, entre el sin sentido,
somos el potencial del profundo sentir,
inconsciente hasta que se despierta
el observador omnisciente
haciendo presente al Ser.

Nos Siento

∴ Paz, Amor y Realización a todos los Seres

amansa tu dragón

No se te ocurra sostener la idea de que puedes matar al Ego.
Sólo el Ego podría mantener tal idea de rivalidad y conflicto con una parte de ti.
Sólo él cree posible tal cosa como la de poder dividir lo que es Unidad.

No puedes matar al Ego,
pero podrás conducirlo amable·mente a su mínima y justa expresión.
Su presencia resguarda la seguridad y sobrevivencia del individuo en el plano físico. De ahí su consciencia de temor facultándole de previsión para la participación, en los niveles primitivos de nuestro desarrollo, para permitirte puedas trascenderles.
Luego sus fantasías han derivado en el falso gobierno de la humanidad
al prestar atención a los fantasmas tan ampliamente divulgados y proyectados.

El Ego es guardián de la caverna mística, el Espacio Sagrado en ti.
Tan eficaz que en su arrebato no deja entrar ni al Amo.

Es el dragón en los relatos de los Caballeros,
el que tiene que ser enfrentado por todo aventurado guerrero y guerrera,
para el logro de internarse en las profundidades de la montaña sagrada,
internarse en su propio misterio.

Enfréntalo…
Con escudo de Amor…
… comprendiendo la reactividad que hace sacar chispas y hasta llamas de fuego a la bestia enajenada en su pasión.
Con la espada de la Atenta Razón… discernimiento
… con la que podrás cortar y liberar las ilusiones que alimentan la inseguridad de tu criatura.
Tu cabalgadura… la Meditación
… fiel vehículo para osar tamaña conquista.

Y asume tal responsabilidad:
› Es tu Criatura ‹
tú le has creado al permitirte creer
en aquello que ahora se defiende ciegamente hasta escapar de tu control.

Conseguida tu victoria al ingresar a la caverna,
podrás liberarte de la armadura — alma·dura—
que te has impuesto por las inclemencias de los conflictos del exterior,
al ir distraída la atención.
Y desprendido de tu coraza, goza la dicha de tu coRazón desnudo.
Otros dominios a conquistar serán por Él señalados.

Manténte atento… no te vuelvas a distraer.
Al dragón hazle dócil, pues está para servirte a ti,
aunque en su enajenación sea capaz de morder tu mano,
la que le ha dado de comer de golosas ilusiones.

Tendrás que adiestrarle para que sirva a la Voluntad de tu Alma.
Quítale todo cuanto alimente sus miedos.
Vuélvele tu Aliado
como el custodio que se mantiene vigilante del portal
resguardando que en tu Interior
se despliegue y juegue libremente el Alma
para salir por fin de su cautiverio.

∴ Paz, Amor y Realización a todos los Seres

Nota: como representa la pintura, el Alma — aspecto femenino — permanece atada a la bestia reactiva y violenta del Ego.